viernes, 25 de octubre de 2019

Actividad 1, tema 1: evolución de las tic


En un futuro nos imaginamos que el mundo no será igual que en la actualidad porque muchas cosas pueden cambiar fácilmente a lo largo de los años. Los humanos somos los responsables de esto, nos dedicamos a transformar el mundo de manera que lo intentamos mejorar a pesar de que no todo sale perfecto, con lo cual, esto puede causar problemas.
Si el siglo XX estuvo marcado por tecnologías como las telecomunicaciones y la informática, en el siglo XXI, gracias a invenciones como Internet, estamos ampliando significativamente el rango de posibilidades al respecto de cómo la tecnología se integra en nuestras vidas, hasta el punto de convertirnos en una especie evolucionada de los seres humanos. Cuando cada vez haya más personas que se propongan una integración de la tecnología dentro de su cuerpo, para convertirse en robots o cuando muchas personas decidan dejar de habitar en la Tierra, para explorar el espacio, el género humano habrá dado un nuevo salto en su evolución, que le llevará a afrontar retos y buscar oportunidades, que hasta ahora tan sólo formaban parte de la ciencia ficción. Los sueños de los autores futuristas comienzan a hacerse realidad en el momento en el que muchas tecnologías se vuelven exponenciales, saliendo del laboratorio para comenzar a aplicarse en todo tipo de situaciones de nuestra vida cotidiana. De esta forma las tecnologías que hasta hace poco estaban restringidas al ámbito científico, espacial o militar, llegan ahora a nuestras vidas con aplicaciones tan concretas como el uso de nanotecnología para crear productos que repelen el agua en los limpiaparabrisas de los coches o el uso de robots y drones para el reparto de productos a domicilio.
la robótica es una de las claras tendencias en el futuro. La posibilidad de que una máquina adopte un aspecto casi humano y sea capaz de operar, casi en su totalidad, como una persona normal es un concepto que intriga, interesa, y al mismo tiempo. Intimida porque la robótica se puede emplear de mala manera, como por ejemplo, sustituyendo los trabajos de los propios humanos, lo cual puede haber un aumento de pobreza en todo el mundo.En cambio si usamos la robótica de buena manera podemos ayudar a mejorar el mundo.